“La Historia Natural de un país no es otra cosa que la descripción de sus sustancias y producciones en sus tres reinos, animal, vegetal y mineral; por consiguiente es el conocimiento exacto de lo que puede hacer el capital de sus particulares excelencias, riquezas y recursos. ¡Pero, cuántos nacen, viven y mueren en un territorio como el nuestro sin conocer lo que ven, sin saber lo que pisan, sin detenerse en lo que encuentran!” (Viera y Clavijo, José de. Realejo Alto, Tenerife, 28.XII.1731 – Las Palmas de Gran Canaria, 21.II.1813. Historiador, literato y naturalista).

Sirva esta reflexión como llamamiento a la ciudadanía para que se informe con claridad y precisión de los valores naturales de este, en ese aspecto, afortunado archipiélago atlántico, y defienda “lo nuestro”, de las continuas agresiones que está recibiendo y que amenazan su supervivencia.

Al esfuerzo por adquirir ese conocimiento de “lo nuestro”, que se debería divulgar entre la población de Canarias, lo llamó Viera y Clavijo en el Prólogo de su Diccionario de Historia Natural de las Islas Canarias “patriótica erudición”.

Siguiendo la huella del considerado el primer ecologista canario, José de Viera y Clavijo, y salvando con humildad las distancias, queremos hacer nuestro ese aleccionador propósito, inculcando el amor a nuestra naturaleza, así como una decidida y rotunda voluntad de conservarla y acrecentarla para que no ocurra con esta riqueza natural lo que ya en el siglo XVIII denunció nuestro ilustre paisano, porque en la actualidad siguen vivos y muy agravados los mismos motivos a los que él hacía alusión: el desinterés, la falta de respeto o el desconocimiento de habitantes, visitantes y gobernantes sobre el territorio en el que habitan y acerca de la importancia y de la ya ineludible necesidad de poner en funcionamiento todos los medios que se precisen para conservar este extraordinario patrimonio natural.

Después de la tregua otorgada a nuestra delicada naturaleza por la pandemia de la Covid, y lejos de haber aprendido la lección, la clase política en general y la empresarial, apoyadas por el aparato propagandístico de comunicación cautivo y a su servicio, se han lanzado nuevamente a una feroz destrucción del patrimonio natural y cultural de este cada vez menos afortunado archipiélago, presentándolo ante la opinión pública como “progreso” o como “desarrollo sostenible”. De igual manera, seguimos asistiendo a la falta de respeto a nuestra extraordinaria biodiversidad por parte de visitantes, residentes y naturales de estas islas, accediendo a zonas y espacios sensibles con absoluto desprecio por sus valores, además, presumiendo de ello a través de su difusión por redes sociales. Para esta clase política, empresarial y social, con la biodiversidad y el territorio de las islas, todo vale, solo es importante el provecho propio y los intereses particulares, no el interés común que representa la conservación de la naturaleza de Canarias.

Esta destrucción y desprecio por “lo nuestro” solo podrá ser parada por la ciudadanía informada y concienciada, para que no siga utilizándose su desconocimiento y pasividad como excusa para continuar atentando contra los recursos naturales y la biodiversidad de Canarias. Por eso desde esta plataforma lanzamos un llamamiento, especialmente a la juventud, para que reaccione, para que se informe y luche por “lo nuestro” que no es otra cosa que lo que es común a toda la ciudadanía de estas islas, su territorio, su paisaje, su
extraordinaria riqueza natural, marina y terrestre, y su riqueza cultural.

Ayúdanos a defender esta tierra. Reacciona y lucha por ella.