PREMIOS VIOLETA DE ORO Y ECOCIDA DEL AÑO – 2025
CANDIDATURAS VIOLETA DE ORO:
1.- Ecomarca suroeste
Ecomarca es una plataforma vecinal que lucha contra la implantación de renovables depredadoras del paisaje, concretamente frente a los proyectos Pilón I y II. Encarna el valor de la comunidad organizada para defender aquello que la historia, la geografía y la vida cotidiana han moldeado: el territorio. Su acción surge del arraigo profundo a lo propio, del conocimiento íntimo del paisaje y de la convicción de que la identidad de un pueblo se sostiene en su naturaleza.
Su labor vecinal demuestra que la defensa del medio ambiente no es solo un acto político, sino un acto de amor a la tierra, su paisaje y cultura. Frente a proyectos que fragmentan, erosionan o mercantilizan el entorno, Ecomarca recuerda que la protección real nace de la gente que vive, siente y cuida su tierra día a día.
2.- Plataforma El Riachuelo–La Graja
La Plataforma El Riachuelo–La Graja es una iniciativa ciudadana de La Palma que defiende un lugar de alto valor natural y cultural frente actividades industriales contaminantes como una nefasta planta de gestión de residuos, la extracción de áridos sin límite y la implantación de una planta de asfalto, actividades que afectan al medio natural, a la convivencia vecinal y a valores patrimoniales como el yacimiento de Cueva Tiznada. Esta plataforma es un ejemplo de defensa colectiva y encarna la fuerza de una comunidad que se organiza para proteger el paisaje y el uso público que da sentido a la vida vecinal.
Su trabajo constante denuncia la transformación de espacios que deberían seguir siendo refugios naturales, patrimoniales y comunitarios. Formada por voces diversas que piden proteger el carácter del lugar, evitar su degradación y exigen a las administraciones públicas el bienestar colectivo frente a intereses privados y especulativos.
3.- Colectivo Transparencia Urbanística
Transparencia Urbanística es un colectivo ciudadano que defiende el territorio desde la vigilancia de la legalidad urbanística y la acción jurídica. A través de la acusación popular, ha combatido durante años la corrupción, la especulación del suelo y el uso del urbanismo como herramienta al servicio de unos pocos, participando en casos judiciales relevantes en Lanzarote como Unión, Jable o Stratvs.
Su trabajo demuestra que la defensa del territorio también se ejerce en los tribunales, con constancia, rigor y una firme vocación de servicio público. Esta labor colectiva está profundamente vinculada a la trayectoria de Irma Ferrer, abogada y referente del colectivo, cuya entrega continuada ha hecho posible una defensa firme, valiente y perseverante del interés general. Transparencia Urbanística recuerda que proteger el territorio es, también, defender la democracia frente a un sistema que más que corrupto, en palabras de Irma: “La corrupción el es sistema”.
CANDIDATURAS ECODIDA DEL AÑO:
1.- Fernando Clavijo, presidente del Gobierno de Canarias.
Bajo su liderazgo político, Canarias ha vivido la reactivación de proyectos y desarrollistas que aumentan la presión sobre el territorio en un momento de emergencia climática. Su respaldo a infraestructuras vinculadas a la expansión turística, como Cuna del Alma o el hotel ilegal de RIU sobre las Dunas de Corralejo, junto a una apuesta continuada por más carreteras y la promoción de actuaciones en zonas sensibles, consolida un modelo territorial profundamente insostenible.
Representa el más absoluto desprecio a los cientos de miles de personas que hemos protestado contra sus políticas exigiendo un cambio de modelo real para las islas. Lejos de escuchar ese clamor social, sus políticas priorizan los intereses económicos de unos pocos y perpetúan una lógica de ocupación y degradación del territorio incompatible con la protección del medio ambiente y el futuro de Canarias.
2.- Mariano Hernández Zapata, consejero de Transición Ecológica y Energía del Gobierno de Canarias.
Consejero de Transición Ecológica y Energía, Mariano Hernández Zapata es nominado a Ecocida del Año por una trayectoria política marcada por la subordinación del interés general a los intereses privados, tanto en La Palma como en el conjunto del archipiélago. Sus planes energéticos favorecen al sector empresarial mientras ignoran las necesidades reales de la sociedad canaria.
Su plan de transición energética pasa por prolongar la vida de los combustibles fósiles importados. Para él la poco ambiciosa Ley de Cambio Climático del gobierno anterior propone medidas sobredimensionadas y es excesiva en un momento de emergencia este ecocida nos conduce al abismo. Es, junto a Fernando Clavijo, responsable de la reactivación ilegal de proyectos como Cuna del Alma o el hotel de La Tejita actuando como un conseguidor para estas y muchas otras empresas privadas.
3.- José Miguel Fraga, alcalde de Adeje desde 1987.
Tras décadas en responsabilidades municipales, su modelo de desarrollo urbano en Adeje ha sido señalado por colectivos vecinales y ambientales como uno de los principales responsables de la saturación territorial del sur de Tenerife. La expansión turística sin límites, la urbanización intensiva y la ausencia de una planificación que priorice el equilibrio ecológico han generado graves problemas de movilidad, acceso a la vivienda, presión social y pérdida de espacios naturales.
Su forma de gobernar simboliza para amplios sectores de la población la continuidad de un modelo que sacrifica el territorio y la calidad de vida de la gente en favor del crecimiento económico y los intereses turísticos. Un modelo agotado que ha convertido Adeje en ejemplo de los efectos más destructivos del desarrollismo en Canarias.
4.- Rosa Dávila, presidenta del Cabildo Insular de Tenerife.
Actúa entre la ignorancia y la arrogancia que este analfabetismo ambiental y social otorgan. Representa con claridad lo que Irma Ferrer ha definido como “indigencia intelectual”: capaz de posar junto a Jane Goodall sosteniendo un discurso ecologista y, pocas semanas después, anunciar miles de millones de euros en ampliaciones de aeropuertos y nuevas infraestructuras ferroviarias.
Ha intentado desacreditar, sin éxito, al movimiento del 20A y a los colectivos que lo sostienen, recurriendo a la desinformación y a la mentira sistemática. Su responsabilidad alcanza también la manipulación de normativas tan necesarias como la del Parque Nacional del Teide, vaciándolas de contenido y avanzando hacia su conversión en un parque temático más al servicio del negocio turístico
5.- Candidatura unificada: Marc García-Durán, Promotor Underwater Gardens y Stefan Kiessling, dueño y fundador de Loro Parque.
Es el claro ejemplo de inversor foráneo que se enamoró de las islas, convirtiendo el territorio en mercancía. Marc García-Durán, tras “enamorarse” de Punta Blanca, impulsa Underwater Gardens: un parque temático que amenaza directamente la ZEC Teno–Rasca, acelera la gentrificación y pone el espacio natural al servicio exclusivo del turismo. Su macroproyecto se ha convertido en ejemplo de cómo determinadas inversiones externas transforman y vacían de vida las comunidades costeras. Marc García-Durán es, en esencia, Stefan Kiessling pintado de verde: la modernización estética del extractivismo y del abuso sobre la naturaleza.
Por su parte, Stefan Kiessling, como directivo vinculado a la expansión de Loro Parque y Siam Park, es uno de los grandes impulsores de un modelo basado en grandes infraestructuras turísticas y en la introducción de fauna exótica que puede afectar a la biodiversidad local. Organizaciones defensoras de los animales han denunciado reiteradamente las condiciones de cautividad de cetáceos y otros animales, así como diversos incidentes y fallecimientos, evidenciando el coste real de este modelo de negocio.
Stefan Kiessling y Marc García-Durán son el mismo personaje en épocas diferentes, ambos hablan de educación ambiental y de conservación del medio ambiente para expandir su negocios, pero lo que realmente hacen es explotar la naturaleza para su beneficio económico a costa de nuestras isla con la connivencia de las instituciones públicas.
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